lunes, 27 de febrero de 2012

Y un escudo de endorfinas me salvó de la náusea adolescente...

Contusión menor

Traté de soñarte con calcetín suicida
En las horas separadas de la convulsión
Que no vino
Que estaba ocupada.

Imaginarme la sinestesia con luz prendida
En la convéxica,
En la concávica.

Fritanga de brisa ardida
En el limón con cebolla.

Y particularmente,
Rehacerme
En tu
Tócame-sin-permiso 

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